El sistema económico es perverso
“El sistema económico es perverso. Pone los mecanismos para que una “vida” sea plenamente digna de ser sostenida a costa de malos vivires y del expolio del planeta” así explicó Amaia Pérez Orozco el funcionamiento de la economía que casi todas y todos conocemos, esa economía que está basada en la acumulación del capital.
Durante el seminario “Subversión feminista de la economía” los días 3 y 4 de marzo organizado por el Programa Feminista La Corriente, Amaia, quien es doctora en economía explicó que “economía es satisfacer las necesidades que hacen sentir que la vida vale pena (…) todas podemos hablar de economía” dirigiéndose a las 30 mujeres que participaron en el evento.
La economía feminista cuestiona las bases de la economía ortodoxa que están centradas en la acumulación del capital, para voltear la mirada en la sostenibilidad de la vida, pues el sistema económico al contrario de proteger, ataca la vida, y quien sostiene realmente la vida es el trabajo de cuidado que es realizado principalmente por las mujeres.
Los cuidados que hacen las mujeres no son reconocidos y se fomenta la idea de que ellas no necesitan cuidados, que deben ser “de sí para el resto”, mediante el cuido de la vida ajena, afirma Amaia y refelxiona que “es imposible sostener la vida de las mujeres justamente en el marco económico actual”
Además del cuestionamiento, la economía feminista plantea la necesidad de una utopía distinta que coloque la sostenibilidad de la vida como centro de la economía, que permita mirar más allá de la acumulación de bienes y de capital, pues el centro de toda actividad humana debe ser el cuido y la preservación de la vida, así como la búsqueda de la vida que merece ser vivida.
Amaia es autora del libro Subersión feminista la economía, Perspectivas feministas en torno a la economía: el caso de los cuidados, entre otros.