Como en todas las sociedades del mundo occidental, las ideas sobre la paternidad y la maternidad se construyen a partir de determinados estereotipos de género. Mientras a las mujeres se les demanda el ejercicio de una maternidad abnegada y se les culpa si fallan en el cumplimiento de estas expectativas sociales, los hombres son vistos principalmente como los proveedores materiales y detentadores de autoridad.
A propósito de la conmemoración del 23 de junio, Día del Padre en Nicaragua, en esta edición de Cuerpos Sin-Vergüenzas les proponemos reflexionar sobre los significados que atribuimos a la paternidad y las consecuencias que ello tiene en el desarrollo de hijos e hijas. También hablaremos sobre la acción del Estado para responder a las demandas de hijos e hijas menores de edad, ante el abandono de sus padres.
En cabina nos acompañaron Mariana Rivas Hernández y Maryórit Guevara, creadoras de “El blog de tu madre”, con quienes profundizamos en torno a los claroscuros de la paternidad en Nicaragua.
Expectativas sociales acerca de la paternidad y la maternidad
La paternidad irresponsable es un problema que ha venido incrementándose progresivamente. La Defensoría Pública reporta el ingreso de 6,555 causas por pensión de alimentos a nivel nacional. De acuerdo a información publicada por el Nuevo Diario, en el año 2015, sólo en el Complejo Judicial Managua se registraron 1,542 demandas por incumplimiento de pensiones alimenticias.
Ante esta dura realidad, Mariana Rivas lamenta que en Nicaragua “son las madres las que siguen ejerciendo el rol primario de cuidar a las hijas e hijos”. Sostiene que el abandono afectivo y económico característico en muchos padres, tiene serias repercusiones en desarrollo de niñas y niños, sobre todo desde el plano emocional “los hombres no son educados a estar en sintonía con sus sentimientos, ser afectivos, es a las mujeres que nos educan de esta manera”, dijo.
En opinión de Maryórit Guevara “los hombres se desligan del cuidado de los hijos (…) son las mujeres las que estamos siempre pendientes de la crianza de hijas e hijos”. Devela que aunque es sobre las mujeres en quienes recaen las tareas de cuidados, socialmente esta labor no tiene reconocimiento “las mujeres no son vistas como educadoras de sus hijos, sino como las asistentes del hogar, las cuidadoras”.
En el transcurso de esta entrevista, desde sus propias experiencias, Mariana y Maryórit comparten recomendaciones a otras mujeres que lamentablemente les toca lidiar con estos problemas. Les invitamos a escuchar y descargar esta edición de Cuerpos Sin-Vergüenzas y conocer más sobre los claroscuros de la paternidad en nuestro país, cómo es el procedimiento establecido por el Código de familia para el reclamo de la pensión de alimentos y cuál es la respuesta del Estado frente a esta especie de pandemia que representa la falta de responsabilidad de los padres en la manutención de sus hijos e hijas.