El pasado 4 de mayo, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos –CENIDH- presentó el “Informe sobre las violaciones sistemáticas a los derechos humanos de los nicaragüenses por parte del régimen dictatorial de Daniel Ortega y Rosario Murillo”.
De acuerdo al informe del CENIDH, los ataques a la libertad de prensa se manifestaron de diversas formas, entre las que se destacan: cierres de transmisiones de cinco canales de televisión; ataques físicos y robo de equipos a periodistas, quema de una radio, el asesinato de un periodista en la ciudad de Bluefields y ataques cibernéticos a medios de comunicación electrónicos.
Con tales medidas en contra de la libertad de prensa, el gobierno pretende impedir a toda costa la divulgación de los actos represivos cometidos en contra de estudiantes universitarios y población de barrios y comunidades que desde el 18 de abril, se manifiestan en diferentes puntos del país.
En este escenario de violencia estatal, donde la prensa independiente ha sido foco de ataques, en esta edición de Cuerpos Sin-Vergüenzas, conversamos con el periodista Ismael López y la periodista Matilde Rocha, sobre el papel desempeñado tanto por el periodismo oficial e independiente, como por las redes sociales.
Estado de la libertad de prensa en Nicaragua
Al hablar sobre la política del gobierno Ortega-Murillo en torno a la libertad de prensa durante los últimos 11 años, Ismael López señala que entre los lineamientos de prensa oficialista, se han prohibido entrevistas de funcionarios públicos a medios de comunicación independientes. Para Matilde Rocha esto forma parte de una centralización donde no hay acceso a la información pública y lo que se conoce es a través de comparecencias de Rosario Murillo.
Matilde e Ismael coinciden que uno de los aprendizajes en un escenario de censura ha sido el poder trabajar en alianzas para compartirse información y verificar la misma entre profesionales de comunicación independientes.
En el contexto de violencia estatal, Matilde afirma que uno de los grandes retos ha sido verificar información con rigurosidad para evitar que les tachen de difundir noticias falsas; en este sentido, Ismael destaca que han abandonado la idea de la exclusividad y han apostado a un trabajo colectivo.
Ambos periodistas reconocen que las redes sociales han sido una herramienta vital para transmitir información. También expresan que uno de los temores en el ejercicio de sus labores de informar, ha sido el tema de la seguridad, tomando en cuenta las agresiones y crímenes registrados en las diferentes protestas, donde también periodistas han sido víctimas de la brutal represión estatal.
Matilde e Ismael mencionan como demanda del gremio de periodistas independientes, que se forme una comisión internacional independiente y que sea esta instancia quien investigue las muertes y agresiones.
Les invitamos a escuchar y descargar esta edición de Cuerpos Sin-Vergüenzas.