¡Las madres no se rinden exigen justicia! Es una consigna que perdurará en la memoria colectiva del pueblo nicaragüense. Ellas junto a las familias de los más de 350 personas asesinadas durante los meses más cruentos de la represión, continúan reclamando el derecho a la verdad y exigiendo justicia para las víctimas.
Las demandas de las madres, hermanas, tías, esposas y otros familiares de las víctimas fatales del régimen Ortega Murillo, constituyen un pilar fundamental en la construcción de la memoria colectiva con que debemos apuntalar las transformaciones futuras para acabar con una vieja historia de violencia e impunidad.
El reclamo de justicia de las “Madres de Abril”, colectivo creado en medio de la represión, ha sido reconocido internacionalmente con el Premio Ignacio Ellacuría de Cooperación para el Desarrollo 2021, otorgado el 26 de octubre del año recién pasado año. Dicho reconocimiento que fue compartido con la Articulación Feminista de Nicaragua, nos recuerda que las nicaragüenses no están solas en su valiente lucha.
Dando continuidad a la jornada especial de Cuerpos Sin-Vergüenzas dedicada a la conmemoración de estos cuatro abriles, en esta edición nos acompañan Susana López, madre de Gerald Vázquez, asesinado en la UNAN – Managua, y Tamara Morazán, hermana de Jonathan Morazán, asesinado en la marcha del día de las madres; ambas integrantes de la Asociación Madres de Abril – AMA y No Olvida.