¿Por qué dialogar las feministas adultas y las jóvenes?
Los cuerpos del feminismo nicaragüense son expresivos de múltiples historias y trayectorias que han dejado sus huellas en las agendas y en el activismo cotidiano.
Se conjugan los feminismos que vienen de los meta relatos de la izquierda en su lucha contra la dictadura y sus apuestas por la justicia social con los feminismos que conjugan parcelas íntimas y públicas de los cuerpos de las mujeres, desde donde denunciar las viejas y nuevas formas de discriminación.
Feminismos que desafían las falsas evidencias del cuerpo como naturaleza y se mezclan con otros cuerpos para dar paso a múltiples transiciones.
Feminismos en cuerpos jóvenes en donde se mezcla la herencia, la resistencia y la renovación.
Son diversos feminismos que necesitan conocerse y re-conocerse como parte de una genealogía.
Cada una le pone al feminismo su propia historia, sus malestares, sus urgencias, sus reflexiones, su cuerpo; por eso, para lograr diálogos fructíferos es necesario conocer cómo vive cada una de nosotras la discriminación, cómo hemos resistido, cuales mandatos hemos transgredido, de qué hemos alimentado nuestras utopías.
Por lo anterior, La Corriente se propuso realizar una serie de diálogos, para responder a variadas inquietudes compartidas por feministas jóvenes y adultas entre las que destacamos la necesidad de conocer los recorridos del feminismo nicaragüense; la necesidad de poner en común los paradigmas de nuestros feminismos en la actualidad; y la importancia de identificar los desafíos que preocupan a las feministas de los movimientos.
Se reunió un nutrido grupo de feministas jóvenes, casi todas urbanas y mestizas, que participan de forma organizada o a título individual en acciones movimientistas; así como, un grupo de feministas adultas que además de tener un largo recorrido en la construcción del feminismo nicaragüense, en la actualidad continúan invirtiendo valiosos esfuerzos en la construcción del movimiento social de mujeres.
Algunas de las inquietudes que están latentes son: ¿Qué significó participar en la Revolución Sandinista? ¿Qué implicó construir autonomía luego de la derrota electoral del 90? ¿Qué significa hoy para las jóvenes hablar del lesbianismo abiertamente y qué significó para las feministas adultas? ¿Quiénes fueron nuestras antecesoras? ¿Qué implicaron las rupturas y los reencuentros? ¿Cuáles son nuestros malestares de género, cuáles compartimos? ¿Por qué queremos unir a todos los movimientos? ¿Es necesario? ¿Es urgente?
Las inquietudes fueron muchas y el diálogo continuó a partir de ¿Por qué las feministas Nicaragüenses en los 80s confiamos tanto en el FSLN y en la Revolución para hacer feminismo? La ruptura del 2006, ¿Fue un problema del movimiento o fue una pelea entre feministas; ¿Cómo impactan las rupturas en las posibilidades de diálogo entre las feministas adultas y jóvenes? ¿Qué feminismo nos acompañó en la época de finales de los ochentas y noventas? ¿Quiénes fueron las feministas que llegaron a compartir con nosotras sus experiencias y conocimientos? ¿Qué les sugiere a las más jóvenes escuchar esta parte de la historia que no ha sido contada?
También dialogamos sobre nuestros sueños y desafíos en un contexto en donde la defensa de los derechos de las mujeres se desarrolla en un contexto sexista y autoritario. Reflexionamos sobre: ¿Cómo conocernos y re-conocernos?, la necesidad de construir un movimiento feminista más dialogante entre su propia diversidad y la importancia de desarrollar formas innovadoras de hacer acción política.
Pero sobre todo compartimos que soñamos con movimientos feministas potentes, en los que muchas mujeres puedan encontrar valor para enfrentar las adversidades, conocimientos para enfrentar el oscurantismo y alegría para vivir sus vidas, como muchas de nosotras lo hemos hecho.