Cuando ocurrieron las protestas de abril del 2018 -que tomaron por sorpresa a toda la sociedad nicaragüense – muchas de las y los jóvenes que las protagonizaron, tenían entre 15 y 25 años, es decir, niños, niñas, adolescentes cuando Daniel Ortega regresó al gobierno en 2007.
Los medios de convocatorio, las acciones de protesta, los lemas, los discursos, las vocerías, todo se fue organizando en medio de la feroz represión que desató la dictadura Ortega Murillo. Nadie estaba preparado para vivir en la clandestinidad, en la cárcel o en el exilio. Nadie, nunca, está preparada para asistir a las muertes violentas que se sucedieron a diario durante cinco meses consecutivos.
Han pasado ya 5 años desde aquel abril y la vida de las y los jóvenes ha cambiado drásticamente. Las lecturas sobre la crisis que vive Nicaragua, sus causas, impactos y posibles salidas, son múltiples y en conflicto. La frustración y la esperanza conviven en miles de jóvenes que dentro y fuera del país, tienen que seguir con sus vidas y resolver las urgencias de la vida cotidiana.
En este podcast conversaremos con tres mujeres jóvenes sobre los cambios, los retos y los aprendizajes acumulados por la juventud nicaragüense durante los últimos 5 años, que sin duda alguna han dejado marcas indelebles.